No temerás al terror nocturno,
ni saeta que vuele de día...
(Salmo 91, 5)
Alabad a Dios
pues ha engrandecido su Misericordia para nosotros,
y su Fidelidad es para siempre.
(Salmo 117)
Y Dios te guardará de todo mal; guardará tu alma.
Guardará tu salida,
y tu entrada desde ahora y para siempre.
(Salmo 121, 7-8)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.